Había escuchado que el productor de esta película quería pagar 5000 pesos por el guión a un dramaturgo; creo que pagó menos. Empecemos por resumir de que se trata.
Don Gato y sus acostumbradas ocurrencias junto con su pandilla viven en su callejón y su dinámica con Matute; nos regalan un episodio “collage” de Laslo Lozla y el Marajá. Don Gato conoce el amor de una gatita (muuuy gata) y por último inicia la real trama conociendo al nuevo inspector de policía de la ciudad, Buenrostro, un personaje que para el chiste evidentemente fácil es feo pero se cree bello y nos lo recetan hasta el cansancio, el cual engaña a Don Gato con la “malévola” tecnología y termina por enviarlo a la cárcel.
Don Gato se adapta a la cárcel y la supera no así la traición de su pandilla que lo cree culpable. Sale de la cárcel vence a Buenrostro y es feliz con su gata.
Es así como una oportunidad de reinventar y fascinar a un publico cautivo por el factor nostálgico, lo resuelven con falta de ingenio, producción de 2 pesos apostándole a lo que caiga en taquilla de los que amamos esos episodios excepcionales de la caricatura.
Los chistes son de una falta de oficio evidente, los personajes pierden hasta el estilo de su voz: a Cucho se le olvida que es yutateco por momentos. Este personaje nos regala quizá el único momento divertido de la película: la subasta del chocolate.
Fácilmente se nota la falta de un equipo creativo para disfrutar nuevamente a los personajes y sus aventuras. Benito es el recurso mas utilizado pero no renovado. Dicho por unas niñas: “Esta mil veces mejor los pitufos” y creo que esto ya es decir mucho.
No caiga en el engaño, mejor con lo que va a gastar en el cine fácil compra la colección de capítulos inolvidables y se queda con mejor sabor de boca.
No soy de las que piensan que lo pasado es mejor, ni es la nostalgia la que me hace pensar así pero si ya tienes un producto de culto, lo mejor que puedes hacer es hacerle justicia y pagar un guión decente. Aburrida completamente
El mejor consejo del dia y calificación "Si tienes que lavar mejor lava"
Escrito por Margarita Román.